Al igual que Martel, Collonges la Rouge es un antiguo priorato que formaba parte del antiguo vizcondado de Turenne, Esta categoría, que data del año 844, le permitió prosperar en la agricultura, el artesanado y el comercio. De esa época data su rica y monumental arquitectura. El sobrenombre de la ciudad le viene de la piedra de gres roja que constituye el principal material de las construcciones de esta magnifica ciudad: Las casas nobles de los siglos XV y XVI, la halle o mercado cubierto, la iglesia de San Pedro…
Es una etapa imprescindible en el camino de Santiago, la muralla de Collonges se vuelve demasiado pequeña para acoger al conjunto de notables que vienen a refugiarse a la ciudad. Su gran notoriedad quizá ayudó a que Collonges la Rouge no sufriera grandes daños durante las guerras de religión. Católicos y protestantes se alternan en la practica de sus cultos respectivos en la iglesia de San Pedro.
Desde entonces, y hasta la venta de Collonges à la corona en 1738 por el vizcondado, la ciudad no deja de prosperar y de aumentar su poderío. Este acontecimiento pone fin a sus derechos específicos y a los privilegios acordados a la ciudad.
Durante la revolución Collonges sufrirá múltiples destrucciones que llevaran a su despoblamiento. La asociación « Los amigos de Collonges » han hecho un gran esfuerzo para devolver la ciudad a la vida.